El 21 de marzo de 2024, el gobierno canadiense anunció su objetivo de reducir la proporción de residentes temporales del 6,2% al 5% para 2027. Este cambio de política tendrá importantes repercusiones para los inmigrantes en Canadá.
El plan del Gobierno canadiense para reducir el número de residentes temporales carece de claridad en cuanto a su aplicación, lo que suscita inquietud por su posible impacto en el crecimiento económico y las necesidades del mercado laboral. Sin directrices transparentes, la política corre el riesgo de crear incertidumbre tanto para las empresas como para los inmigrantes.
La reducción de las vías para los residentes temporales puede sobrecargar los plazos de tramitación de la residencia permanente y los recursos, ya que más personas compiten por unas plazas limitadas. Surgen dudas sobre la equidad y transparencia de la política, lo que subraya la necesidad de una comunicación clara y un trato equitativo.
La reducción de la proporción de residentes temporales puede limitar las oportunidades de los extranjeros que deseen trabajar o estudiar en Canadá. Los sectores que dependen en gran medida de los trabajadores extranjeros temporales, como la agricultura y la prestación de cuidados, podrían sufrir escasez de mano de obra y dificultades operativas.
Los actuales residentes temporales pueden tener dudas sobre sus perspectivas a largo plazo en Canadá. El aumento de la competencia por las vías de residencia permanente podría dar lugar a plazos de tramitación más largos y a un proceso de aprobación más selectivo, lo que afectaría a su capacidad para planificar el futuro.
La Isla del Príncipe Eduardo ha puesto en marcha un nuevo marco demográfico y ha reorientado sus programas de inmigración. Para 2024, la provincia reducirá sus nominaciones anuales de inmigración federal en un 25% y redistribuirá las nominaciones restantes para alinearlas con los sectores clave que enfrentan escasez de mano de obra.
La historia de Immaculate N muestra el poder de abrazar la diversidad como inmigrante en Canadá. Nacida en Rumanía, criada en Grecia y orgullosa de sus raíces congoleñas, el origen multicultural de Immaculate la ha convertido en una ciudadana y líder global. A pesar de las dificultades, ha sobresalido, convirtiéndose en una de las Mujeres Negras Más Realizadas de Canadá y Embajadora Mundial de Youth Opportunities Canada. Sus consejos hacen hincapié en la creación de redes de apoyo, el voluntariado y la apreciación de la rica diversidad que hace especial a Canadá.